El culebrón televisivo "Cuéntame" ridiculiza la Semana Santa

Saludos.

Hacía años que no veía este culebrón progre, sobre todo desde que empezó a politizarse y dejar de ser un reflejo antropológico de la sociedad española para convertirse en un panfleto edulcorado.

En fin, que zapeando, cáspita, me encuentro con unas escenas de una procesión de pueblo. Luego hilando, se concluye que es el Viernes Santo de 1977, auqél en el que se legalizó el PCE. No era difícil de adivinar. Bueno, con permiso de los primeros ruanes en Málaga, jejeje.

Sagrillas se llama la localidad ficticia, se supone de los alrededores de Madrid, cuando aún eran Castilla la Vieja y Castilla la Nueva.

Es Viernes Santo, como he dicho y vaya, van vestidos de impólutos costaleros en un pueblo de 500 habitantes, cuando lo lógico es que la gente de dentro fuera vestida de calle. Pues eso, faja, costal, zapatillas, camiseta blanca (le falta la serigrafía) bueno aparte de que es muy dudoso de que esa sea la tracción de los pasos en la zona castellana a finales de los 70 o incluso ahora mismo.

La mente enferma del guionista se inventa, además, una cuadrilla de romanos perfectamente ataviados, que ya quisiera el Santo Traslado, con unos uniformes que deben valer una pasta, en la cual colocan, como no, al niño hiperactivo de Cuéntame, que liga con una jovencita vestido para la ocasión. Los chistes y comentarios sobre Espartaco no se hacen esperar.

El paso-trono es tal vez lo único fidedigno del surrealismo de todas las escenas. Una mesa con cera, luces y un palio muy mal puesto. Curiosamente la Virgen (de estilo castellano) cambia de tocado y se le ve mejor el rostro en otros planos.

Y cáspita, el cura, siempre regañanando y "mu saborío" (cómo no, estamos en Cuéntame) va de capataz. Da órdenes de un escalón y el momento fellinesco cuando dice "Tos por igual valiente, a esta es". O sea, que a ese pueblo llegó la globalización cofrade con 25 años de antelación, y la máquina del tiempo siguen funcionando cuando suena la marcha "Hermanos Costaleros", que por arte de magia se adelanta 11 años a su propia composición que fue en 1988. La banda de pueblo que participa en la procesión ya la había montado antes de que la compusiera Abel Moreno (creo, ya que no es un tema que domino). Lo del año sí lo he visto en la web de patrimonio musical.

Bueno, aquello que debería tener un mensaje subliminal, algo negativo para la iglesia, porque estamos hablando de Cuéntame y ahí todo tiene un porqué. Y claro, han buscado una veta cómica ya que los costaleros empiezan a discutir y a pelearse cuando están cargando y el paso comienza a dar bandazos en plan caricaturesco. Enferma y mucho la imaginación del equipo de guionistas que se ganan el sueldo y hacen méritos con este guiño laico.

De nuevo errores en la proporción entre el esfuerzo y lo poco que se supone que pesa el paso, e incluso en la forma de colocar los brazos para cargar, que seguro lo han visto en algún dvd actual y el colmo en un plano interior en el que la mesa o submarino adquiere dimensiones extraordinarias.

El cura sigue regañando y el Echanove (uno de los de la ceja) sale de debajo del faldón echando pestes por la boca, diciendo tres o cuatro palabrotas (curiosamente se recrea en ello y no en otras escenas) y para final la madre perfecta con la sobrina diciendo en la siguiente escena que ya no van más al pueblo en Semana Santa.... que indirectamente para el espectador es algo rancio y antiguo como del Régimen anterior frente a la modernidad que nos avisa la serie.

Insisto, pura casualidad, he visto 10 minutos de esta basura y aquí estoy contando Cuéntame.

Para vomitar bueno y encima no tienen ni puta idea de lo que es una procesión castellana a mediados de los 70. Espero que la Virgen que ha salido en el culebrón no esté bendecida.

Saludos.