Via Crucis 2009

El primer Viernes de la Cuaresma 2009 tuvo todos los ingredientes de una jornada procesional. Por no faltar, ni faltó la amenaza de lluvia, tanto a la ida como al regreso, que obligó a aligerar el ritmo de la comitiva. Novedoso ver al "Señor de la Salud" (como se escuchaba decir a muchos malagueños) tumbado, en su primera salida extraordinaria, con la excepción que se sepa del traslado desde su casa hermandad hasta San Pablo tras Semana Santa. Tuvimos oportunidad de observarlo desde los distintos ángulos, con su mirada dirigida hacia la derecha, con sus amplios brazos extendidos, con la peculiar postura de piernas de un Crucificado aún vivo y que no se desploma, con el característico perixoma al estilo Duarte, en fin una oportunidad única que tardará en repetirse. El cortejo de ida con poco público aunque sí muchos participantes con cirios tanto de las agrupadas como de la hermandad de la Salud en particular. Todo el mundo muy bien vestido y en actitud muy respetuosa, algo digno de elogio, ya que cualquier extraordinaria en Málaga está adquiriendo unos niveles que hay que mantener sea cual sea la circunstancia. En el atrio del templo despidieron representación del Cautivo y del Traslado. Se nota que hay buena sintonía entre las tres corporaciones.

Las andas repiten el modelo habitual, con la excepción (que esperemos se convierta en costumbre) de incluir una campana entre los dos varales, a la altura del cajillo. Está claro que la campana es imprescindible en el buen coordinar de levantar o bajar un tronito o parar en momentos concretos en que los ciriales están muy cerca. El exorno floral de espinas lo vi algo escaso, pero sobre todo peligroso, y no es broma, porque en un empujón o un despiste de un portador se podría haber clavado una espina y quedarse "tuerto". No es broma. Recordar dos hechos curiosos como fueron el saludo de los rocieros con su guión y bastones y sobre todo el cruce por el Puente de la Aurora y el caos circulatorio que se produjo. El tráfico de salida del Pasillo Santa Isabel estuvo cortado 18 minutos por mi reloj ya que la cruz guía estaba al final del Puente mientras que el Cristo salía de Trinidad. Creo que esto hubiese tenido una fácil solución si la comitiva hubiera entrado por el Pasillo de Guimbarba (junto al Hotel ibis) y cruzar por el puente de la Trinidad, donde sólo tiene que sortear dos escalones. Así el corte hubiese sido mucho menor, como mucho de unos 7 u 8 minutos. Además, la colocación del Cristo permitía la baja altura del Puente.

acompañamiento de capilla musical, impecable y más aún el cuidado trabajo de incensiadores y ciriales. Ahora bien, en casos como el de ayer creo que los cuatro ciriales deberían ir en las esquinas de las andas, ya que este es el origen de estas piezas, iluminar imagenes que no llevan elementos propios de iluminación en las andas. Es más, en la Catedral sí se colocaron los ciriales de esta guisa y creo que es más estético, práctico y sobre todo encuadra mejor al conjunto y es de más fácil localización desde cierta distanicia. Con respecto al Via Crucis en sí, comentar varias cosas: 1.- Está muy bien organizado, aunque curiosamente no se siguen las Estaciones que hay en las columnas o paredes de la Catedral. 2.- Muy bien la megafonía, a excepción de la girola donde el sonido se distorsiona. Será algún fenómeno de las ondas sonoras. Muy curioso. 3.- Precioso el librito para seguir el Via Crucis. ¿Quién me consegue uno? jejeje 4.- El Señor Obispo demuestra una gran interioridad y sosiego, frente al maremagnum de cámaras de fotos, flash y focos dirigidos a su rostro, gente dando la paliza con "doscientosmilmillones" de trípodes, gente hablado y comentando sus fotos, etc. La verdad es que ayer noté el tema de los fotógrafos más exagerado y pesado que nunca. Se nota que cada vez están más baratas las cámaras y los trípodes. No sé si habría que restringuir su acceso en la Catedral (ya sé que seguro que es una opinión impopular) pero es ciertamente absurdo no participar en un rezo cuando estás a medio metro de la persona que sí lo hace. Por cierto, muy interesantes las reflexiones dirigidas a los cofrades. Tal vez habría que hacer unas recomendaciones a los fotógrafos y aprender de los profesionales o gente más veterana que aparecen y desaparecen sin estorbar y que saben dónde hay un Sagrario y hacer la genuflexión ante Él. Ayer sentí vergüenza ajena de muchos cofrades (incluido algún hermano mayor) que pasa ante Jesús Sacramentado y no se enteran. Incluso un sacerdote tuvo que invitar a la genuflexión a su paso.

La procesión de regreso con sones musicales trinitarios llevó un ritmo más ligero y estrenamos el año con Mater Mea que acompasó el buen trabajo de los hombres de trono. El paso por Strachan siempre con el surrealismo de ver gente cenando que no se inmuta ante Jesús en el madero, y luego los curiosos embalajes de esculturas en el Museo una una calle Larios donde empezaron a notarse los huecos de gente. Tal vez habría que haber entrado por la Pz. de las Flores y salir directamente a Rioja y Nueva, evitando el vacío de la Pz. de la Constitución, que ya se había hecho a la ida. Cisneros y Especería siempre muy recoletas y luego la Rampa (que nos trajo recuerdos de la curva de 180 grados ya de madrugada cualquier día de Semana Santa). Más tarde el frío Puente, la amenaza de lluvia y rápido para el templo. En fin, una jornada memorable, de reencuentro con amigos, conocidos y algún forero que ayer se me presentó. También un recuerdo para el amigo Juanma Quiñones que se lo perdío por estar en el Hospital. Es curioso hablar por el ordenador con gente con la que aún nunca habías hablado personalmente. Pero sobre todo, unos momentos de interioridad y reflexión (por lo menos para mi) meditando sobre el sentido de la Cuaresma y el camino hacia la Vigilia Pascual. Todo lo demás, cada vez más secundario pero más importante, aunque sea un contrasentido. Subiré algunas fotos a mi blog, ya que por aquí me da error. Intentaré poner algo original, porque ya misma habrá más gente con cámara que sin ella, jejeje.